Noticias de la ciudad La mañana había aparecido, luminosa y despejada, disponiendo al día, a gozarlo en grande. Primeros pájaros trinaron, con la luz de la alborada, y las bandadas dirigían su rumbo, ante el que mande. El jardín muy primoroso, despertaba, aspirando las primeras, frescas brisas. Bañándose de rocío que, les encantaba, gotículas transparentes, en flores y risas. Las margaritas, fueron las con premura, en darse cuenta, de cambios en el cielo. El aire ventoso, fue perdiendo frescura, y nubes oscuras, amenazaron piedras de hielo. Los alelíes, se agruparon en tristeza, y hasta el pastito, se apegó más al suelo. Advirtieron a espinos, interrumpieran su pereza, enviaron a grillo, averiguara como señuelo. La rosa roja, muy inquieta, no cesaba su mirada, de inclinarla al cenit. “Si caen piedras, quedarás inhiesta”, Dijo maldito el pastito, pareciendo feliz. La rosa asustada, reclamaba protección, ¿Quizás plumas buscaba?, ¿Quizás un piquito de amor? Pronto grillo apareció… de ciudad contó traición, otros jardines nuevos instalados, parecían ensoñación. Grillo agregó haber visto, un ave rapaz, comandando las flores, revoloteando de vigilante. Pastito más feliz dijo, ¡Seguro el halcón es capaz! mas la rosa indignada, le lanzó una espina lacerante. Fue el turno de los alelíes, quienes rieron a coro, diciéndole, ¡Ahí tu lección, envidioso desconfiado! Margaritas continuaron, abrazando con su centro de oro, otras florecillas afirmaron, ignorar lo insinuado. En vuelos rápidos, aparecieron en bandadas, gorriones trayendo noticias válidas. de la ciudad, con bellos jardines en plazas instaladas, entusiastas por colores, en canteros de flores cálidas. Las margaritas, tímidas preguntaron, sobre otras aves, de revolotearlos capaces. mas éstos, contaron que solo palomas, empujaron, pero nada peligroso, no habían rapaces. Todo el jardín brincó feliz, al ver a su rosa encendida, más carmín que nunca, esperando calmar sus celos. mientras de lejos, se acercaba, en intención emprendida, majestuoso halcón, directo a su rosa, en marcado vuelo. Los gorriones, aunque asustados, explicaron a toda la floresta, que en ese jardín, su reina, tan bella y a su lado, único amor del halcón es, y… deje de ser modesta. Renée Escape

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